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Como llegar AMAIUR-ELIZONDO-BERTIZ-DONEZTEBE-ZUBIETA |
Hemos elegido como punto de partida de
esta ruta el pequeño pero a la vez hermoso pueblecito de
Amaiur, estandarte de la independencia navarra.
El monolito que recuerda a los héroes
de 1522 se encuentra en una colina en la parte alta del pueblo,
a 5 minutos andando (ascendiendo hacia la izquierda) de la ermita
que marca el final de la calle mayor. Este monumento homenajea a
los navarros que primero se rebelaron en 1521 contra la ocupación
de Castilla, tomaron el castillo de Amaiur y, tras sufrir un largo
asedio, tuvieron que rendirse el 19 de julio de 1522.
Camino a Elizondo, a 7,5 km pasamos Elbete
(palacio barroco de Jarola, de 1680), prácticamente pegada
a esta singular "capital" de Baztan que es Elizondo. Tras
visitar sus interesantes edificios civiles y religiosos, podemos
realizar la próxima parada en Irurita, con el fin de visitar
sus palacios de Dorrea y Gaston Iriarte, y su iglesia de San Salvador.
Después continuaremos en dirección Iruñea-Mugaire.
En esta nueva dirección, a 2,5 km
a la derecha contemplaremos un precioso caserío y casa-torre,
especialmente destacado sobre el terreno a causa de sus tonos rosáceos.
En el mismo pueblo de Arraiotz encontraremos más palacios
interesantes. Más pronto que tarde, terminaremos por atravesar
por Oronotz-Mugaire y encontrarnos a su término con la entrada
del impresionante parque del Señorío de Bértiz
(18,5 km).
Además de los hermosos parques botánicos
y bosques de Bértiz, en el mismo pueblo se pueden visitar
la iglesia de Nª Sª de la Asunción (siglo XVII)
y el palacio de Arretxea.
Hay que decir que, además de los monumentos,
todas y cada una de estas poblaciones que vamos conociendo están
jalonadas por preciosas casas y caseríos de estilo navarro,
constituyendo por sí mismas sobresalientes conjuntos de casas.
Sucede lo mismo, por poner un ejemplo, en el siguiente pueblo de
Narbarte.
En el km 23,5 y a la izquierda entramos en
Doneztebe, situada en medio del valle del mismo nombre y al lado
del río Bidasoa. En su parte vieja, nombrada Monumento, encontraremos
construcciones góticas, renacentistas y barrocas, preciosos
ejemplos de la arquitectura popular de la zona y, además,
la vistosa iglesia de San Lorenzo, con su campanario blanquecino
de forma cuadrada compuesto de tres cuerpos.
A la salida del pueblo tomaremos a la izquierda
antes de cruzar un puente, en dirección a Saldias, y, de
esta manera, llegaremos primero al barrio de Donamariako Bentak
y más tarde al pueblo de Donamaria a la izquierda. Este pueblecito
se halla dominado por la espectacular casa-torre Jauregi (siglo
XV), una de las construcciones defensivas de la época más
impresionantes y bonitas de toda Euskal Herria, sobre todo por el
entablado de madera que cubre el segundo cuerpo de la construcción
de piedra de sillería. También es destacable la torre
de la iglesia del lugar.
Otra vez en el barrio de Donamariako Bentak,
tomamos esta vez a la izquierda y, dejando Oitz a nuestra derecha,
llegamos en el km 31 a Urrotz (iglesia de San Miguel, del XVI).
Nada más entrar, atravesamos su centro ascendiendo hacia
la izquierda, en la dirección que nos marca el embalse del
Leurtza. Para llegar a este lugar, seguid la pista que comienza
donde acaba el pueblo, siempre en línea recta y hacia arriba,
mientras a nuestro alrededor van apareciendo cada vez más
árboles y el paisaje se va volviendo más hermoso a
cada curva. A 4,5 km veréis que a vuestra derecha surge un
nuevo camino, señalizado por un cartel marrón; si
lo seguís, llegaréis finalmente al citado embalse
de Leurtza, situado en medio de un entorno salvaje.
Tras haber disfrutado de la hermosura de
esta fantástica zona (sobre todo en primavera), retrocederemos
hasta Doneztebe, y en ella tomaremos la dirección a Leitza,
para pasar enseguida por Elgorriaga, salpicada de bonitas casas
de coloridas balconadas. A 2,5 km de ellas Ituren, otro precioso
pueblo de casas y caseríos adornados con multitud de flores.
Además, también es de destacar el retablo del siglo
XVII que guarda su iglesia.
Los siguientes 3 ó 4 km a lo largo de este bonito valle,
los que nos llevan hasta Zubieta, llevan consigo la esencia de sus
míticos carnavales además de hacernos recordar el
espectáculo visual de sus Joaldunak y el estrépito
de sus Zanpantzarrak. Estos últimos suelen salir de Zubieta
el lunes posterior al último domingo de enero, y los iturendarras
les devuelven la visita el día siguiente, con lo que la mitad
del camino la suelen realizar todos juntos, en un vistosísimo
grupo de gente formado por numerosas personas disfrazadas. Zubieta
es, además de todo ello, otro de estos pueblos de preciosas
casas que tanto nos han gustado a lo largo de todo el recorrido.
Otra vez de vuelta a Doneztebe, en
esta ocasión atravesamos el pueblo en dirección a
Iruñea, para de esta manera cruzar un puente y tomar la carretera
general en dirección Behobia-Irun. En medio (en el km 79,5)
pasaremos por Igantziko Bentak y terminaremos en uno de los pueblos
más hermosos de la Regata del Bidasoa, esto es, en Lesaka,
de la cual encontraréis más información en
el capítulo anterior.
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Que ver |
ELIZONDO - BAZTAN
Baztan es un valle formado por 15 pueblos organizados en un único
municipio, el más grande y uno de los más euskaldunes
de Navarra. Como en la ruta atravesaremos la mayoría de sus
poblaciones, esta vez nos centraremos en su núcleo principal.
Elizondo se halla estructurada en torno a dos largas calles, a
lo largo de las cuales, sobre todo en su Kale Nagusia o calle mayor,
encontraremos numerosos palacios y casas solariegas, de tal modo
que queda bien probada la secular hidalguía y nobleza de
las gentes de Baztan: Arizkunenea, Istekonea, Arozarena o Arretxea,
ésta última antigua Casa de Juntas del valle.
La iglesia de Santiago nos ofrece una fachada monumental y dos
torres de tonos rojizos en su exterior, y los retablos de San José
y de la Virgen del Rosario en su interior de cruz latina. Destacaremos
así mismo el Ayuntamiento del siglo XVIII en su plaza, las
ermitas de San Pedro y Santa Engracia y dos viejos puentes de piedra
tallada sobre el río Bidasoa. Para finalizar, en los alrededores
del pueblo se pueden encontrar numerosos menhires y dólmenes.
EL SEÑORIO DE BERTIZ
En el norte de Navarra, entre Doneztebe y Elizondo, tenemos el
pueblo de Oronotz-Mugaire y, en él, el considerado Jardín
de Euskal Herria.
EL ORIGEN
DEL PARQUE
El Señorío data inicialmente del siglo XIV, y a
partir de ahí ha constituido el valioso patrimonio de varias
familias nobles, pero el personaje clave de esta historia no surge
hasta el siglo XIX, cuando el abogado, viajero y políglota
baztandarra Pedro Ziga lo compró en 1889. A partir de este
momento rehabilitó el palacio del siglo XVIII sito en la
entrada y construyó el palacete modernista de Aizkolegi en
el otro extremo del parque.
Entre tanto, tuvo tiempo de realizar numerosos viajes, de los cuales
se solía traer un considerable número de arbustos
y árboles exóticos, que utilizaba para ir adornando
cada vez más su jardín, y cuyo resultado constituye
el maravilloso jardín botánico que podemos contemplar
hoy en día alrededor de la entrada. Antes de fallecer en
1949, el señor Ziga donó el parque a la Diputación
y al Obispado de Navarra, con la condición de que fueran
respetadas sus características, de tal modo que en 1984 acabó
convirtiéndose en Parque Natural.
CARACTERÍSTICAS
DEL PARQUE
El Señorío cuenta con 2.000 ha repletas de hayas,
robles, castaños, etc. Además, en sus tierras viven
desde zorros o corzos hasta jabalíes y gatos monteses, pasando
por nutrias y un número ingente de especies de aves de todo
tipo (azores, gavilanes, petirrojos
).
El Parque, por otra parte, se halla dividido en dos zonas bien
diferenciadas: por una parte, el Jardín y el Palacio de Bertiz
(hoy en día Centro de Interpretación de la Naturaleza)
alrededor de la entrada, y el Parque Natural por otra.
El Jardín, de 4 ha de extensión, comienza tras la
entrada y guarda numerosas especies de vegetación tanto autóctona
como exótica. Para poder contemplar todo como es debido,
podemos, además, tomar un camino marcado con números,
que nos va llevando de árbol en árbol y de arbusto
en arbusto, éstos también marcados con su nombre y
origen. Por si fuera poco, este paraje se encuentra todavía
más adornado por cascadas y estanques artificiales. Por último,
podemos admirar el río Bidasoa, habilitado a tal efecto.
Según salimos del Jardín a la derecha, iremos adentrándonos
en el Parque de 2.000 ha, a lo largo de cuyos senderos bien señalizados
(pedid el folleto en la entrada) tendremos una incomparable muestra
del bosque atlántico. Además de los numerosos árboles
de todo tipo, llegará hasta nuestros oídos el rumor
de tantos y tantos riachuelos que los atraviesan. Tomando a la izquierda
en el segundo km (junto al caserío Markesenea), este nuevo
sendero no terminará hasta Aizkolegi, a 11 km de la entrada.
Se trata de una larga caminata, y además cuesta arriba, pero,
de la misma manera, no deja de ser una maravilla.
El Parque se encuentra abierto entre abril y octubre de 9 a 20
horas, y en horario de invierno de 9 a 18 horas. El Jardín
se abre en verano de 9 a 14 y de 16 a 20 horas y en invierno de
10 a 14 y de 16 a 18 horas. El Centro de Interpretación se
cierra media hora antes que el Jardín; además, los
lunes por la mañana permanece cerrado. La entrada para adultos
cuesta 1,2 €
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Fotos |
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